Desintoxicación mercurio

Eliminación de amalgamas con protocolo de seguridad y desintoxicación de metales pesados

Los empastes metálicos o negros están hechos de un material conocido en el mundo de la odontología como “amalgama de plata” y utilizado como material restaurador desde 1826.

Paradójicamente el 50% de la composición de esta amalgama es Mercurio (una de las sustancias más tóxicas del planeta), el 50% restante esta compuesto por otros metales como: Plata 35%, Estaño 13%, Cobre 2% y Zinc en menor proporción.

Se supone que el mercurio no se desprende de la amalgama cuando ésta ha fraguado en los dientes y muelas de nuestras bocas; sin embargo,  se produce una corrosión progresiva dando lugar a que el mercurio se desprenda de la amalgama de forma continuada. Se pueden liberar aproximadamente 34 microgramos de mercurio al día por cada una de las amalgamas presentes en nuestras bocas.

 

Problemas asociados al mercurio:


  • Toxicidad celular: El mercurio es liberado lenta y progresivamente de los empastes en forma de vapores de mercurio. Este es absorbido directamente por las vías respiratoria y digestiva al deglutir saliva o alimentos.
  • Galvanismo: Se crean corrientes eléctricas en boca. Estas corrientes son de mayor intensidad y peores cuando coexisten también en la boca otros metales como el oro, cromo-cobalto, cromo-niquel…



El mercurio puede estar presente en la sangre, aunque esto no sea un claro indicativo del nivel de intoxicación, ya que este se va acumulando por todo el cuerpo tras ser transportado por la sangre. El mercurio puede ser depositado en todos los órganos del cuerpo, es capaz incluso de atravesar la barrera hemato-encefálica llegando al cerebro e incluso en embarazadas puede atravesar la placenta pasando al feto.

Utilizamos un protocolo personalizado para cada paciente, pero las medidas de seguridad principales son el Protocolo recomendado por la IAOMT (International Academy of Oral Medicine & Toxicology) para protección tanto del paciente como del profesional.

 

Protección del paciente contra la exposición al mercurio:


  • Mantener las amalgamas frías
  • Cortar en trozos
  • Utilizar doble aspiración de alto volumen
  • Proporcionar una fuente alternativa de aire
  • Eliminación inmediata de la aleación de mercurio
  • Lavado y cambio de guantes
  • Protección del paciente; gafas, dique de goma…
  • Considerar la ayuda alimenticia
  • Mantener el aire de la habitación puro

 

Medicación para la detoxificación de metales pesados



Cada paciente precisará de un tratamiento determinado que le indicará su terapeuta o se lo proporcionaremos directamente nosotros, previa valoración del caso.

Puede requerir tratamiento homeopático, fitoterapia, oligoelementos…

Lamentablemente, las fuentes de metales pesados que nos intoxican día a día son numerosas, por lo que aun no teniendo amalgamas dentales en la boca, no estamos libres del riesgo que estas sustancias suponen para nuestra salud.

Las amalgamas en algunos casos pueden ser la principal fuente de intoxicación crónica de metales, pero hay otras como la ingesta de pescado, los tatuajes en la piel, vivir en una ciudad y cerca de industria, las vacunas o algunos medicamentos son importantes fuentes de intoxicación.

Podemos encontrar mercurio en baterías, en la mayoría de bombillas de bajo consumo y antiguos termómetros de mercurio, que en caso de romperse suponen un problema importante. Por otro lado no hay que olvidar que la industria y la minería vierten a la atmosfera, a los ríos y mares toneladas de mercurio y otros metales pesados cada año.

Son 7 los principales metales pesados: Mercurio, Cadmio, Plomo, Arsénico, Bario, Berilio, Aluminio.


Más información: